viernes, 25 de mayo de 2018

CASTILLO DEL BELMEZ

Visto desde abajo

Si me aprietan no hacía esta mañana temperatura de finales de mayo, aunque ya se sabe "hasta el cuarenta de mayor no te quites el sayo", es cierto que eran las nueve y poco de la mañana, cuando aparqué el coche y me dispuse a subir las escaleras de la calle dedicada al "Alcalde del millón". Rafael Canalejo Cantero, concursante de aquel concurso "Un millón para el mejor", porque Joaquín era el párroco de la Compañía. Parece mentira, que lo primero que se le ocurre a uno, en un pueblo de de mucha história, de una gran tradición minera, de monumentos megalíticos, de luchas y de un castillo árabe, sea el recuerdo de un concurso televisivo, es la real demostración de cómo nos manejan y del poder de la televisión. 

Plano del castillo

Vista aérea de GoolZom

Puerta de entrada

Rampa escalonada de subida

Una engalanada calle por las fiestas de mayo, me lleva a las rampa escalonada de subida. No puse el GPS, porque me amilanó un poco la subida, que no es peligrosa pero que bueno, y no sabía que me iba a encontrar. Decir que la cota del mapa es de 614 m.s.n.m. (en Alicante), que la subida tiene unos 280 mts. y que empiezas en la cota 540 m.s.n.m. subes 74 mts. por lo que con una simple regla de tres da un porcentaje de subida de un 26,6 %. El zig-zag y los descansos miradores, te permiten oxigenarte, pero la subida es para corazones adecuados.

Puerta de la muralla

Pequeño aljibe

Torre del Homenaje

Lado sin muralla 

Es impresionante la roca caliza donde está instalada la fortaleza. Aunque la cantera de abajo hizo que peligrara el monumento, vamos que si los dejan acaba la cantera con toda la roca. Es lo que viene a llamarse una explotación extensiva. Primera puerta, cancela abierta -todas lo están- y se llega a la muralla y la primera de las seis torres circulares. Un irregular patio de armas, medido  con las herramientas digitales, da 1736 m2 de superficie irregular y la impresionante Torre del Homenaje, de unos 12 metros de altura sobre el patio, por 94 m2 de base. A la izquierda los 34 m2 del aljibe, que excavó Félix Hernández en 1961 y el resto de aposentos.

Dentro de una torre

Escaleras a no sé dónde

Belmez

Dentro de la torre del Homenaje

Silencio absoluto, solo roto por el agudo sonido de las rapaces. Por lo demás 360º totales de visión sobre el valle del Alto Guadiato: Sierra de Palacios al sureste, Sierra Boyera y el embalse del mismo nombre al oeste, al noroeste Peñarroya, majestuosa su peña que brillaba al sol de la mañana, más a la izquierda Fuenteovejuna, al sur Sierra Buitrones,  y al norte el Peñón de la Juanita de 740 m. de altura camino de Hinojosa. Y los colores, que son imposible cuantificar en su gama de verdes. 

Escaleras

Un aposento

Segunda planta de la torre del homenaje

Roquedal

Carmen Reina escribe un bonito artículo en Cordópolis, que titula "El guardián del Alto Guadiato", que tiene un espectacular vídeo del castillo. La protección del camino de Córdoba a Toledo era fundamental con este castillo. Construcción primitiva de fabrica árabe, luego sucesivas reformas de los siglos XIII y XV, además de la francesa de primeros del XIX, hacen  que quede poco de la fábrica original. Fernando III, lo conquista en 1235, junto con Pelay Pérez Correa, Gran Maestre de la Orden de Santiago. Luego en 1316 cae en manos árabes otra vez. El Infante don Pedro de orden del rey Alfonso IX, lo vuelve a ocupar años más tarde.

Salida

Abajo el sendero

Amapolas

Chumberas

En 1462  el Rey Enrique IV lo dona junto con la villa a Pedro Téllez Girón Gran Maestre de Calatrava. El feudal de turno Fernando de la Cueva, se rebela según figura en un documento fechado en Almagro el 19 de junio de 1462, diciendo entre otras cosas que no lo entregaría. Pero el Maestre de Calatrava se pasó eso por allí y permutó la villa, junto con la de Fuenteovejuna, por Osuna y Cazalla, para los apaños de las propiedades de la Orden. Muchas siglos en la ruina después, hasta 1810 que las tropas francesa lo ocupan y lo constituyen en plaza fuerte del control de esa zona. En la zona el Barón Shépeler tuvo algunos encuentros con el Conde Dérbon general francés en 1812. Luego también fue parte de la contienda entre Riego y los realistas en 1820.

Desde la ermita de abajo

Vista de la pared norte

Otro detalle de la pared norte

Los vecinos, parece decidieron destruir el castillo, para evitar su utilización en una nueva invasión francesa. Poco más, en 1961 Félix Hernández, actúa en él, como se dice en el principio y ya habían parado la explotación de la cantera de fosfatos. Sucesivas intervenciones nos han llevado a nuestros días, algunas de muy mal gusto, la Junta de Andalucía en 2001 lo consolidó. Luego está el vandalismo que ha destrozado todas las luminarias del camino, incluso las que estaban protegidas con una rejilla metálica, sin olvidar las pinturas de los grafiteros que de esta manera perpetuán su nombre para que se conozca su interés por la cultura y su destrozo. 


Otras entradas del Blog relativas a Belmez:

Fotos y vídeos del autor
Bibliografía de Castillos de Córdoba de Mercedes Valverde

4 comentarios :

Adelina Cano dijo...

Excelente artículo! Muy amplio y documentado. Gracias por tu visita y por difundir nuestro patrimonio. Sólo un pequeño apunte: Belmez, sin tilde.

PATXI GUERRIKABEITIA dijo...

Buenos días, amigos. Bonito trabajo. Hace muchísimos años que estuve por allí y, el castillo era una pura ruina. Por lo que nos muestras se aprecia una gran mejoría, y que tiene sus visitantes, ya que veo que el nombre de los burros aparece por las paredes. Un abrazo y, gracias por seguir al lado de los que estamos en la Diáspora.

Paco Muñoz dijo...

Muchas gracias. Podéis estar orgullosos/as de vuestra ciudad, es una maravilla, la pena es que su esplendor procedente de la minería ya no lo tenga. Hubo una polémica con lo de la tilde, la puse a conciencia para generarla, pero después se me quedaría alguna, lo siento.
Un abrazo y una maravilla Belmez.

Paco Muñoz dijo...

Amigo Paco, muchas gracias. Está, para los cafres que somos algunos ciudadanos que merecen ser súbditos, bastante bien. Un abrazo