viernes, 10 de junio de 2011

EL ÁRBOL DE LA MEMORIA

El árbol

Ayer tuvo lugar la inauguración del Árbol de la Memoria, en los jardines del mismo nombre situados en la parte más oriental del Barrio de Fidiana. Una iniciativa para que no olvidemos nada, porque el olvido es la muerte.


El cartel decía:

“Las sociedades que olvidan de donde vienen, pierden una parte importante de su conciencia”


Cartel

Y la explicación de la obra:

“Cuarenta y tres poemas se desarrollan sobre una estructura arbórea, a partir de una verso común –que se corresponde con el tronco- se ramifican en cuatro niveles.

Tiene una lectura lineal, desde el tronco hasta el final de cada rama, donde se encuentra una ‘hoja’ con el cuarteto. También se puede leer por niveles, dando la vuelta y ‘saltando’ de rama en rama, así como lecturas aleatorias”


Organizaba el Acto la A.VV. Diana, Foros por la Memoria y Casa de la Memoria, a pesar de que la temperatura era agradable, y la hora asequible, no observé una gran cantidad de público, si quitamos al artista y sus colaboradores, que eran bastantes y a sus familias, a las directivas de las entidades organizadoras –que no estaban al completo- y a gente de otros barrios, queda una número exiguo para los vecinos de Fidiana. Se les habría olvidado el acto.

Un poema

Este acto tuvo además un acontecimiento histórico adicional, fue el último acto institucional que IU ha hecho en Córdoba, entendiendo esto como representando al Ayuntamiento de Córdoba. Los próximos años ya sabemos quien representará a la ciudadanía.

Otro poema.

Por un momento esperaba ver aparecer a la “amiga tuteladora” del por dos días aún actual alcalde, eclipsándole el acto como ha hecho en repetidas ocasiones, y más siendo un acto con un árbol de por medio. Las caras eran un verdadero poema, claro las caras son el espejo del alma.

Un verdadero poema

El abrazar durante ocho años el populismo, significa que el populismo de otro más populista te coma. Es un juego de palabras pero es verdad. Es cierto que se tiene que gobernar para todos pero no lo es menos que no se pueden “olvidar” los orígenes, ya hubo un aviso y si se olvida la historia se está obligado a repetirla.

Otro poema, sin teléfono.

Se me olvidaba conté entre los asistentes al acto cinco o seis concejales, entre salientes y eternos, alguno nuevo, ¡Ah! Y algún diputado andaluz culpable de esta debacle, cuando para no perder el sueldo se plegó a las veleidades de una señora egoísta, ambiciosa, e incluso cruel con sus colaboradores más directos, y… a las pruebas me remito,  aún no hemos acabado. La Sra. del avión se marchó antes del acto y la cara que decir de la cara.

Cierre del acto.

Alguno, aleluya sin teléfono, ahora a lo mejor la factura tiene algo que ver.  ¿Si me dio pena? No. Creo que fue más grave, no sentí ni frío ni calor, sólo eso que se llama indiferencia. Cada palo debe aguantar su vela, y este palo ha acabado con la vela de una organización que, o se refunda con una absoluta renovación, o acabará hundiéndose en lo más profundo del océano de las ideas.

Un poema con una hermosa puesta de "sol"

Creo que el mensaje del Árbol de la Memoria es suficientemente didáctico. No se puede olvidar los orígenes; mucho cruzar el “Quema” hasta que se quemaron del todo; mucho mundo cofradiero, sin serlo, y le dieron la comunión por no decir lo otro. Esto significa que otra serie de personas al paro o a ponerse otra chaqueta. 


Mis felicitaciones a los organizadores y creadores de la idea porque merece la pena, y además el acto será inolvidable, por los poemas del árbol de la memoria y por el otro poema histórico, por ser el último acto institucional de una fuerza que no se merece como ha sido llevada a la casi desaparición por sus dirigentes –y no será porque su creador hace bastante años propuso la regeneración de la misma-.

Fotografías del autor.
Texto entrecomillado del cartel.

2 comentarios :

José Manuel Fuerte dijo...

Quien no conoce bien su pasado nunca sabrá cómo afrontar su futuro.

Paco Muñoz dijo...

Buena cita y es verdad.