domingo, 31 de agosto de 2014

ÁVILA: LAS MURALLAS

El paño norte de las murallas de Ávila

Hace tiempo teníamos ganar de visitar Ávila. La última vez que estuvimos bajábamos de Salamanca de paso para Toledo por El Tiemblo, pues queríamos visitar los Toros de Guisando. Nos paramos en la Cruz de Humilladero de la carretera, la que salía en los cuadernos del colegio. Otra vez de noche, desde el ferrocarril, camino del norte en un Estrella, vimos las murallas iluminadas en la distancia.

Adarve, la catedral

Ahora era la ocasión, después de haber estado en Alcalá de Henares, aprovechando la desertización agosteña de Madrid, nos desplazamos a Ávila. En principio habíamos reservado habitación en el Palacio de Valderrábanos, pero por un problema administrativo la anulamos y reservamos en Arco de San Vicente, los dos cerca de la catedral. 

Adarve paño este

El robo de las autopistas desde Madrid (se quejan los abulenses) casi once euros de Madrid a Ávila, y el túnel pase, pero la AP51, teniendo una buena carretera nacional, es colaborar al enriquecimiento seguro, de los amiguetes gubernamentales del IBEX 35. Digo seguro porque, si tienen déficit en la explotación, el rescate lo pagaremos los españoles. Ellos ya han sacado su tajada de; la recalificación de terrenos, y de la construcción. 

La catedral siempre en todos sitios

Y se han hartado de hacer autopistas de pago, la comunidad con más deudas de España, pero no hay desplazamientos para mantenerlas. Nos restarán del deficiente estado del Bienestar, que nos han dejado, para que no pierdan los amigos, hasta que la gente no aguante más. Pero con esto habría para doscientas entradas y hoy va de las murallas de Ávila.

Vista del paño este y necrópolis romana

Pagamos los peajes de la AP6 y AP51, nos cruzamos pocos vehículos, primero avenida de Madrid y después avenida de Portugal. Si uno no se emociona con las murallas de Ávila, como con el Acueducto de Segovia o con la Torre Eiffel, no se emociona con nada. El conjunto es un verdadero espectáculo, y eso que nosotros estábamos viendo solo el paño este, y el Arco de San Vicente. Una maravilla.

Parte de la catedral y correos

Después de tomar el alojamiento a la calle, eran solo dos días y el programa muy apretado. Palacios; conventos, conventos y más conventos, y para terminar conventos. Y pensábamos nosotros que el patrimonio eclesial en Córdoba era grande, siempre hay quien te gane, en Ávila grandísimo. Lo que nos hacía imaginar ¿Si Doña Teresa de Cepeda y Ahumada, esa adelantada mujer, no hubiera nacido aquí, qué hubiera pasado con esta hermosa ciudad? Por eso, sin obviar lo que no puedes obviar, esto está montado así, por lo que trataríamos de disfrutar de otros espacios. Sin desmerecer a la figura de Doña Teresa, a la que valoramos bastante.

San Vicente desde arriba de la puerta

Aparte de Santa Teresa, para los místicos y cristianos,  las Murallas de Ávila son el universal símbolo de la ciudad, el sky line de la misma, aunque siempre se dibujará una espadaña o una torre también en el recuadro. Son el recinto amurallado medieval mejor conservado de España, incluso de Europa. Aunque en origen son romanas, tienen una consideración románica, pero hay discusión en cuanto a su datación y construcción.

La integración de las casas

Lo tradicional es decir que, en mayo de 1090 comenzaron a construirlas, tras la conquista y, como no iba a ser, con la bendición de un obispo. Casandro Colonio y Florín de Pituenga con 2000 hombres a su órdenes tardaron nueve años en la empresa. Luego se piensa que su actualización fue en el siglo XII. Lo primero que se empezó fue el costado oriental, por ser más llano, aprovechando restos de la muralla romana y de las necrópolis situada en las cercanías del Arco de San Vicente.

La Ronda Vieja 

Piedras procedentes de la necrópolis, cistas, donde depositaban las cenizas, están enquistadas en la murallas, así como estelas mortuorias. Y las esculturas zoomorfas de los verracos, iberas  o cuando menos seguro que preromanas. Apertura de puertas, reforma de otras, consolidación en los siglos XIX y XX. Miedo de su derribo, con aquella fiebre de piqueta del siglo XIX que en Córdoba acabó con los vestigios de las puertas de su muralla. Afortunadamente aquí no ocurrió. La última restauración ha sido en el pasado siglo. 

San Martín (mudéjar) y la Encarnación en el centro

Las cifras: tiene un perímetro que es un casi rectángulo, de unos 2.526 metros, nueve puertas, 88 cubos de refuerzo o torres (30 en el paño norte, 25 en el sur, 21 en el este y 12 en el oeste), 2500 almenas, que son posteriores en origen no tenía almenas. Su altura a pesar de parecer homogénea, en algunos lugares es menor que la realidad, por la colmatación de materiale en su base, pero la media es de unos 12 metros. La Catedral, como en la Mezquita, está enquistada en el muro, y el Palacio Episcopal también formando parte de ella.

Un quiebro cercano a la puerta del Carmen

Las puertas son: Puerta del Peso de la Harina, Puerta de San Vicente, Arco del Mariscal, Puerta del Carmen, Puerta de la Malaventura, Puerta del Puente, Puerta de la Santa, Puerta del Rastro y Puerta del Alcázar. Todas ellas están dotadas de inimaginables leyendas, a cuál más espectacular. A continuación una breve descripción de las puertas. Las letras corresponden a su posición en el plano.

Plano de las puertas

Nueve puertas de arriba abajo y de izda. a dcha.:
  Puerta del Peso de la harina, Puerta de San Vicente, Arco del Mariscal, Puerta del Carmen, Puerta del Puente, Puerta de la Malaventura, Puerta de la Santa, Puerta del Rastro y Puerta del Alcázar. (Foto Casagredos)

A.-La puerta del Peso de la Harina, o de la Catedral, es del siglo XVI y está en el lugar que anteriormente del postigo de los Abades. Al pie de la puerta se encuentra la Casa de Misericordia o del Caballo, llamada así por la figura de San Martín a caballo. Desde aquí hasta la de San Vicente podemos ver restos de la antigua muralla romana.

La espadaña del Carmen en la muralla norte

B.-Dirección norte,  Puerta de San Vicente. Es similar a la Puerta del Alcázar,  se construye sobre la antigua muralla romana y se aprovechan los materiales extraídos de la necrópolis que allí había. Y los usuarios que compraran su tumba tan contentos de lo perdurable, para luego acabar en un lienzo de muralla. Incluso un verraco ibero está embutido en ella, en el Cubo de la Mula, esquina noreste, de la que sobresale el testuz del mismo.

Puerta del Carmen y espadaña

C.-La Puerta del Mariscal, del Mariscal de Castilla don Álvaro Dávila. También se llama Puerta de Fuente el Sol por los señores de Fuente el Sol. Se sitúa a unos trescientos metros de la anterior y hemos tenido que seguir hasta la esquina norte, para después girar hacia el oeste para llegar a ella.

Espadaña

D.-La Puerta del Carmen o Arco de la Cárcel, por la espadaña del convento de carmelitas calzados, que fue antes de Cárcel provincial y luego Archivo Histórico. Hacia el oeste por el camino de la Ronda Vieja hasta que se vea la espadaña, que la verdad es que no pega ni con cola. Se construye en el siglo XIV para entrada y salida de carros.

Plaza de Concepción Arenal

E.-La Puerta del Puente no es tan importante como las orientales pero fue un importante acceso a la ciudad desde el oeste, por donde existe una gran parte de la comarca. Entre los S.XV y XVI se remodeló remodelación y la primitiva portada medieval quedo casi anulada.

Puerta de San Vicente

F.-La Puerta de la Malaventura, también Puerta de la Mala Dicha, Arco de los Gitanos o de San Isidro, el santo porque estar levantada donde el atrio de la Iglesia. Por esta puerta, en 1492, abandonaron los judíos la ciudad tras el decreto de expulsión de los Reyes Católicos. Está a unos 400 metros de la puerta anterior.

Esquina sureste

G.-Por su parte, la Puerta de la Santa o de Montenegro tiene dos torreones cuadrangulares que la arropan. Arriba un pequeño matacán. Recibe su nombre porque es el acceso Convento de la Santa, construido sobre la que fuera casa de Santa Teresa. Una galería porticada a la izquierda es del Palacio de Blasco Núñez Vela, Audiencia Provincial. Fue escenario de una historia de amor trágica.
Puerta del Rastro y Palacio de los Dávila

H.-La Puerta del Rastro, medieval, modificada en el S.XVI que la puso un gran arco carpanel que es su seña de identidad actual. La galería corrida pertenece al Palacio de los Dávila adosado por el interior.

Puerta del Alcázar

I.-La Puerta del Alcázar, Imita la Puerta de San Vicente. No se sabe a ciencia cierta si era puerta del pasado, tiene dos grandes torreones unidos por un puente. Contaba con foso y barbacana, para evitar que las máquinas de asalto pudieran llegar a la muralla.

Cista enquistada (piedra funeraria romana), en la muralla

Es mucho lo que se puede escribir sobre las murallas de Ávila, como hemos dicho son unas de las mejores conservadas de España y de Europa, la UNESCO al incluirla entre las ciudades Patrimonio Mundial expone los criterios de su inclusión: "Ávila es un ejemplo notable de ciudad fortificada de la Edad Media que ha conservado íntegramente su recinto amurallado. La densidad de los monumentos civiles y religiosos es excepcional" (III). "Es el ejemplo más célebre de las 'repoblaciones' iniciadas por el Reino de Castilla después de ser reconquistada Toledo" (IV)." 

Lienzo oriental de noche

Luego está la posibilidad de pasear por gran parte de sus adarves, de ver la ciudad desde un prisma distinto, con espíritu de defensor de un ataque a su inmenso patrimonio. De día apreciosas, de noche hermosisimas. Aunque sabemos que en el fondo estamos viendo un decorado de la historia, con unos criterios de remozamiento distintos a la realidad primitiva, hay que reconocer que es un conjunto maravilloso. Eso no podemos perderlo nunca de vista. 

Puerta de San Vicente de noche

Desde la oficina de Turismo de la calle de San Segundo, subimos a las murallas, a su adarve, y nos bajamos en la Puerta del Carmen para callejear hasta el hotel. He de decir que fue un paseo precioso, y tuvimos que lamentar el no poder hacerlo de noche, que se puede hacer, porque hubiese sido espectacular. Y luego las tuvimos detrás muchas veces, sentados en los jardines del Rastro, con un paisaje castellano delante. Y mirando hacia el sur, hacia la Sierra de la Paramera, a sabiendas que allí, detrás del horizonte, estaba Andalucía y, como no, nuestra Córdoba.

Lienzo este, zona de la necrópolis romana

Por muy bien que se esté en un sitio, por muy hermoso que sea, tiene que duplicar o triplicar la hermosura de Córdoba para quererte quedar allí. Es una hermosa ciudad, pero no la hemos visto con los rigores del invierno, si no en un verano tibio. Tengo un amigo en Solosancho, un pueblo de la provincia, que me hablo una vez de diez  bajo cero. Y una compañera de estudios, que vive allí, me comentó en alguna ocasión la crudeza de sus inviernos.

Palacio episcopal embutido en la muralla, en el paseo del Rastro

Nada de eso, el clima, la saturación de conventos, el agobio de Santa Teresa, etc. le quitan ningún valor a la ciudad castellana, pues puedes coger lo que te interesa, obvias lo que no, y tan contentos. Y no he entrado en la gastronomía, por aquello de que vamos de murallas, pero habría para una buena entrada, también obviando los dulces eclesiales. Para terminar decir que es ciudad para repetir más de una vez.

Verraco, escultura zoomorfa (como los toros de Guisando) enquistada en la Torre de la Mula

Fotografías del autor salvo el plano, puertas y el verraco
Bibliografía Murallas de Ávila.

5 comentarios :

PATXI GUERRIKABEITIA dijo...

Buenos días, amigos. Paco, magníficos trabajos. Aunque sigo escaso de tiempo por eso de las vacaciones, no puedo dejar pasar el espectacular trabajo que has hecho sobre Ávila y su muralla, adornado con unas magnificas fotografías.
Como amante del arte y su historia hay cosas que me ponen “del hígado” y es quitarle la patita del tiempo a los monumentos. La muralla de Ávila es uno de los muchos casos de exceso de anastilosis, con fines turísticos. La Doctora Bárbara Palomares dice en su Blog Los lugares tienen memoria: “La única técnica de reconstrucción aceptada es la anastilosis, técnica que conlleva serios riesgos si no es aplicada con rigurosos estudios por parte de los especialistas, pero por muy riguroso que sea el estudio, cualquier mínimo error de interpretación sobre el monumento puede derivar en la “invención” del mismo, provocando equívocos irreparables en la historia, en el arte, e incluso pudiendo llegar a crearse “falsos históricos”.
¡Vamos! que algunos lo que sueñan de noche lo hacen historia al día siguiente. Un abrazo.
De las barbaridades hechas en Medina Azahara, o la del patio de los “gatos” que cabeza la mía; Patio de los Leones de la Alhambra, para otro rato.
P/S: Adjunto un enlace sobre la historia de verdad de la muralla de Ávila, no la que nos cuentan a los turistas.
muralladeavila.com/es/.../transformaciones-en-la-edad-moderna-s-xvi-xv...

Paco Muñoz dijo...

Muchas gracias Patxi.

Otra definición arquitectónica que he aprendido hoy. Creo que por eso en las rehabilitaciones procuran que quede claro lo que es antiguo y lo moderno. Y es evidente que con un simple error de cálculo lo que queda para la posteridad es la visión del rehabilitador. Es como la interpretación de un director de cine de una obra literaria. Conozco el enlace y es estupendo de una gran categoría.

Un abrazo

José Manuel Fuerte dijo...

Qué gran trabajo y qué magníficas fotos. Se nos ha quedado un hueco por ver allí en la vieja Castilla, pues hemos estado en Segovia, en Cáceres, en Salamanca, en Zamora,... pero después de ver tu entrada, habrá que tapar ese hueco e ir de inmediato a disfrutar, como vosotros lo habéis hecho, de la peculiar Ávila.

Gracias por compartir.

José Manuel Fuerte dijo...

Estimado Patxi Guerrikabeitia, en parte estoy de acuerdo contigo, y en parte no.

Siempre que el restaurador no traspase la línea de la prepotencia y lo haga con humildad, seriedad y conocimiento histórico-artístico, no viene mal, aunque sea con el riesgo de fracasar, tomar decisiones que hagan, al fin y al cabo, que las personas que observan saquen conclusiones positivas.

Muchas de las restauraciones "diferenciadoras" caen en la trampa del exceso de lucimiento personal, con lo que consiguen la pérdida de identidad del elemento restaurado, y por lo tanto un rechazo general que casi con toda seguridad quede justificado.

En el caso de Córdoba, por ejemplo, el arquitecto Víctor Escribano, pudo no haber sido nunca un gran investigador histórico, pero supo recuperar un yermo convertido en vacie, en algo atractivo, como es el Alcázar. Con una base histórica de "papel de fumar" sin duda, pero una estética no desentonante.

Quizás con arqueólogos investigando la zona se habrían sacado otras conclusiones. Siempre habrá tiempo.

Siento haberme extendido demasiado. Un abrazo.

Paco Muñoz dijo...

José Manuel muchas gracias, pero no es todo las murallas, hay mucho que ver y dsifrutar en esa ciudad, desde luego con buen tiempo pues cuando dice a hacer frío tiene tela. Hemos estado en Alcalá de Henares (preciosa), Ávila, luego otra vez en Segovia y ya van cuatro o cinco, ydespués en Almagro, la cuna de la Orden de Calatrava. Muy interesante.
Coincido contigo en la respuesta a Paco Guerra. Un abrazo