sábado, 28 de febrero de 2015

CIRCULAR BARRANCO DE LOS PICAPEDREROS, CENTRO DE VISITANTES DE LOS VILLARES Y GR48

Tracker del recorrido circular

En el mes de febrero he subido tres veces por el barranco de los Picapedreros, porque la última ha sido hoy 28 de febrero. La primera subí hasta las casas de los trabajadores y bajé por otro sendero, desde el cortijo en ruinas del cruce con el sendero de los Arenales, que nos lleva nuevamente al arroyo de los Picapedreros y enlaza con el que sube. La segunda iba buscando rodear el cerro de la Miniya, algo más alto que el de Pedro López, 621 m.s.n.m. por un sendero que serpentea el mismo por su ladera sur, por la cota de los 550 m. y enlaza con un cortafuegos que llega hasta su cima.

GR48 / Vereda de Villaviciosa dirección noroeste

Planteé dejar el coche en la entrada de la Urbanización del Cordobés, y desde ahí subir a buscar el cortafuegos primero, para después desviarme por el sendero citado. Mi gozo en un pozo, valla cinegética, y aviso de ganado bravo, esto creo que pertenecía a la llamada Hacienda del Cordobés. Entonces decidí subir por los Picapedreros y llegar desde arriba, al mismo sitio. Busqué antes de desistir una entrada y llegué hasta el GR48, pero imposible a un lado y a otro la maldita valla. Y lo de menos es el ganado bravo, por aquello de la sangre torera, es peor otro ganado.

La cinegética

No insistí, seguí hasta el barranco de los Picapedreros y subí por el mismo. Siempre me resulta arrebatador el paisaje, monumental, con una sinfonía rosa de granito a ambos lados, un arroyo con agua, que gracias a los desniveles suena. Alrededor señales en las rocas de haber bajado también el agua por ellas. Picapedreros. Quien tiene una cierta edad, se puede acordar cuando estaban adoquinando las calles en Córdoba, años cincuenta. Yo tengo recuerdos de empedrar calles aledañas a la Mezquita, así como el ruido que hacían los picapedreros, con unos martillos de largo mango. 

¡No más vallas!

Este oficio es uno de los más antiguos, el precedente de marmolistas actuales. Corte, desbastado, labrado. Y quiero recordar también que no tenían protección ocular, picar y picar. Luego con unos martillos con unos picos de acero, hacían el dibujo de rugosidad, de picado, en la piedra. Hay que imaginarse la calidad de vida que tendrían estas personas. El suegro de Emilio Fernández -ya lo he dicho en varias entradas-, trabajó allí, y hasta para el agua bajaban a la Alcubilla de al lado de la carretera, junto a la casilla de Peones Camineros. 

Vereda de Villaviciosa

Este sendero o vereda, es la continuación de la Vereda de la Pasada del Pino. Parece ser que se llegó a un acuerdo verbal con el propietario de los terrenos de Villares altos, para dejar expedita el camino de los Picapedreros y cerrar el de los Arenales. Pero al final no está muy claro, es una información que me ha facilitado mi amigo, Manuel Trujillo. Por otra parte también me ha llegado una información lamentable incluso con daños físicos a un amigo (Canario), denuncia incluida al agresor, el propietario o arrendador de la finca, que quedó en agua de borrajas, por aquello de los poderosos de siempre.

Vereda Pasada del Pino

Ahora otra valla, pero en este caso como es la Vereda de la Pasada del Pino, tiene puerta y el cerrojo sin candado, nos adentra en la finca Villares Altos. Seguí subiendo. Ya el espacio se tornaba semi australiano, casi llano, granito desecho en el suelo y un enorme eucaliptal. A los dos kilómetros, cruce de caminos. Opté por el que circunda el campo de golf, que también está cercado con valla cinegética, y lo nombran como perímetro de seguridad. A los 862 m. se llega al cortafuegos, cogemos a la derecha, y enfrente parte otro que nos deja en el Centro de Visitantes de Los Villares, decidí este para reducir la aventura, y por si me obligaban a volver. A la derecha el nacimiento del arroyo del Agua y una enorme superficie de pinar. 

Campo de golf ¡cuánta agua consumen!

Mi gozo en un pozo, al llegar a las inmediaciones del Centro de Visitantes, después de un kilómetro recorrido, cuando ya veía sus instalaciones, una puerta en el camino, pero con cadena y candado. Se acabó, no más vallas, búsqueda de un palo con forma de y griega, levantamiento de la malla, introducción del palo y a reptar. Cuando pasé la valla me di cuenta que lo que había es salido del coto. Ahora a la derecha estaba el sendero botánico, que discurre hacia el suroeste, paralelo en este lugar por el llamado Arroyo del Agua que parte del campo de Golf, que cogí durante unos 750 mts.

Cortafuegos autopista

Al llegar a un panel donde el sendero cambia su orientación, hacía el este, torcí a la derecha para llegar al GR48, menos de doscientos metros. Una charca del mencionado arroyo, y una orquesta de ranas. Tenía dos opciones, o GR48 a la derecha por una fuerte rampa, o buscar la CO-3408 por la izquierda. Decidí la izquierda. Unos metros adelante me encontré a una chica, Nuria, con su perro Un boxer de cara noble. Hablamos durante un rato y me dijo que su ruta era ir al Lagar de la Cruz. Como yo le había preguntado por un atajo a la Conejera, decidí seguir un rato con ella, hasta que a los pocos metros se desvió para buscar el camino entre CO-3408 y el Lagar. 

Salida de la cárcel, luego lo dejé como estaba

Yo seguí el sendero hasta aproximarme a la parte norte de la urbanización del Cordobés, antiguo cortijo de la Matriz, y enlacé nuevamente con el GR48. He de decir que el GR48 por esa zona es precioso. Lástima que cercano a la salida de la carretera de Villaviciosa, había en el camino a la orilla del arroyo, un jabalí muerto en un estado de descomposición avanzado, y si no se remedia, los restos irán al arroyo y éste desagua en el Lago de la Encantada de las Jaras. El recorrido efectuado sobrepasaba la media que hago normalmente, es decir mis límites, y me notaba síntomas de agotamiento.

El concierto de ranas en el Arroyo del Agua

Aún me quedaba un tramo para llegar al vehículo, y ya me estaba poniendo nervioso por el cansancio. Decidí aflojar las ganas de llegar y pensar que lo importante era no agotarme del todo. Ya había cerrado el círculo, ahora era volver sobre mis pasos, recorrer nuevamente el camino hasta la entrada de la urbanización. Volví a ver las vallas cinegéticas, que me habían impedido hacer el camino por donde lo había pensado, y nuevamente me cabreé. He de decir que en los doce kilómetros del recorrido solo me crucé, y siempre por el GR48, un senderista, la chica de nombre Nuria, y un ciclista.

Un árbol en el camino

Cuando el GR48 se dispone a cruzar la carretera de Villaviciosa, decidí seguir por el arcén izquierdo, según el sentido de mi marcha, para evitar el cruce de la misma, no estaba muy ágil para encontrarme, al cruzar la carretera, un vehículo con conductor de los que piensan como Fraga, con la calle. Era incómodo el arcén pero seguro. Y ya el coche estaba a la vista, y el descanso. Cierre del programa informático del recorrido, tres horas sin parar y doce kilómetros, era natural el cansancio.

Un jabalí contaminante

Una vez en el coche volví a ver el camino andado en la pantalla, comprendí que en las fotografías aéreas, no se ven las malditas representaciones físicas de la propiedad privada. Esos elementos metálicos que delimitan la libertad. La mayoría de las veces son cárceles para animales, a los que encierran en las mismas para su sacrificio posterior, por dinero y ocio. Es el matar por matar. No el matar por sobrevivir, que es ley de la naturaleza. Pero esa es nuestra sociedad moderna.

La salida a la Matriz, carretera CO-3405 antigua CP110

Una nota final. Hoy ha sido la tercera vez que subí y bajé por el barranco de los Picapedreros en este febrero que acaba, había un poco de overbooking, mucho ciclista y senderistas. Uno de ellos me llamó la atención: -Nosotros nos conocemos de Facebook. -me dijo. -Es verdad si no me llamas la atención no me doy cuenta, gracias. Eres José Carlos Cabello. -le dije. Un buen conocedor de la ciudad y sus alrededores y buen fotógrafo también. Le acompañaba su hija y un amigo. Hablamos y me comentó que bajaban de Pedro López, fuimos juntos hasta la casilla de la carretera, y allí nos despedimos. Un agradable encuentro, pues nos conocíamos solo virtualmente.




Fotografías y vídeo del autor
Bibliografía lo mismo

6 comentarios :

Canario dijo...

Buen recorrido Paco, es una zona muy bonita y diferente del resto de la sierra por la geología tan diferenciada. El haberte encontrado con la malla que tuviste que pasar por debajo, lo podrias haber evitado entrando en el campo de golf donde está señalada una puerta con pestillo pero sin candado, que te permite continuar la Vereda de la Pasada del Pino por donde está desviada provisionalmente ya que el Club de Golf está en mitad de la vereda (creo que pasaba por el hoyo 18). El Club se rodea por dentro de su malla gracias a un camino-cortafuegos perimetral, que te deja justo en el acceso principal del Club, en la carretera de Los Villares, y desde ahi puedes continuar rodeándolo por fuera de la malla (entre ésta y la carretera) en dirección oeste, bien hasta pasar por donde saliste de la malla y cojiste el sendero peatonal, bien un poco más a la izquierda, donde hay un senderete cercano a la carretera que te lleva hasta la entrada del Centro de Visitantes e incluso hasta casi el cruce del 14% (Cambrón! ;-))

Antiguamente no existía la malla perimetral y podias salir directamente al puente roto del Arroyo de Don Lucas, junto a la carretera, o bien al tramo del GR48 pegado al Arroyo donde croaban las ranas, pero eso se acabó con la maldita malla.

Un saludo!

Paco Muñoz dijo...

Paco gracias por la información. Yo cuando pasé por ahí hace bastantes años, no había valla perimetral y desconocía esa puerta que dices permiten la entrada. Hoy he subido a la Miniya y a la bajada (me consideraba incapaz de bajar por donde subí), pensé hacerlo al contrario, pero cogí otro antes de llegar a ese, muy cómodo. Hoy me he dado una buena paliza, después de subir a la Miniya casi subí a Pedro López después (me faltaron unos doscientos metros) pero por poco cojo un pájara, me mosqueé y me di la vuelta.
Eso que tú dices no lo conozco, yo entré en el botánico, y llegué hasta el arroyo. No he estado en el puente roto que dices. Considero que llamas al Arroyo Don Lucas el que en el plano pone del Agua, yo creo que es ese también pero que lo corta el lago.
No sabes cuánto aprendo Paco, muchas gracias.

Canario dijo...

Paco, en el argot ciclista le llamamos "Puente Roto" al que está en Km. 7 de la carretera 3405, justo donde -si no me equivoco- confluyen la Vereda del Villar con la de Linares, al pie del cortafuegos que baja desde La Torre de vigilancia de La Miniya donde has estado ayer, te mando un enlace en Street View:

https://www.google.es/maps/@37.957077,-4.831744,3a,88.6y,14.26h,63.71t/data=!3m4!1e1!3m2!1sLKPDSxo3CkRR8DJLZnGQKg!2e0

Por si no lo conoces, hay un estrecho sendero que conecta el extremo del puente más alejado de la carretera (se puede vadear a la derecha o pasar por el "filito" de hormigón del puente que es lo único que queda tras unas fuertes crecidas del Arroyo) con la zona del Torrente Jóven/Barranco de los Picapedreros, paralelo a la carretera pero en algunos tramos muy por encima de ella, ¡muy bonito!

Ojo porque también se le llama "Puente Partido" o "Puente Roto" al que está abajo del puerto de Los Arenales, en el cauce del Guadiato, próximo a reunirse con el Guadalnuño, que también tiene su Puente ¿Romano?, aunque este está en perfecto estado de uso, supongo que conoces la zona, que es espectacular.

Me voy por las ramas!, lo que quería decirte también, es que he consultado los mapas 1:50.000 del ejército, "los de siempre", que es con los que empecé a aprenderme la Sierra hace muchos años, y me fio mucho más que de "San Google Maps", y en estos el "Arroyo del Agua" viene como "Arroyo de Don Lucas", tanto en el tramo antes del Lago de la Encantada como después. Viene desde la zona del sendero botánico y el GR, pasa bajo el Puente Roto, se pone paralelo a la carretera hacía Las Jaras, y entra en el Lago (embalse) de la Encantada. También nombra el Arroyo de Los Arenales, pero sin embargo no tiene nombre asignado en el de Los Picapedreros, aunque marca un curso de agua. El Arroyo de Don Lucas tiene también un transcurso muy interesante por la Finca La Alhondiguilla antes de desembocar en el Guadiato, es fácil acceder desde la zona de Baldios de Trassierra / Vado del Negro, más allá del caserón de Los Sanchez Ramade en La Alhondiguilla.

¡Estoy pendiente de tus aventuras por la zona de Las Jaras!, verás cuando "descubras" el barranco de Sierra Carbonera, que es la vaguada del Raso de La Mala Noche hasta el Rio Guadiato, andable pero no ciclable en buena parte, y que también figura en los 1:50.000 antiguos. ;-)

Un saludo!

Paco Muñoz dijo...

Gracias Paco por la extensa información.
Sí conozco ese puente, creo que es una de la curvas de la carretera antigua. Lo pasé buscando una entrada el otro día para pasar por la valla. Y pase por el filo del muro.
El de abajo también, bueno los dos, el romano y el califal, ambos preciosos. Luego había otro (solo los soportes) río abajo del vigente de río de la CO-3405.
Coincido contigo con lo del arroyo de D. Lucas, no me fío de la cartografía raster de Goolzoom porque tiene muchos errores de bulto. Y Sierra Carbonera la he andado pero muy poco. Y es verdad el arroyo de los Picapedreros no le ponen nombre, pero le damos el del Barranco y ya está.
Respecto a lo de la Alhondiguilla he tratado varias veces de colarme para ver el convento pero tendría que cortar la malla.
Esta mañana he estado en la torre de TV, y en un cortijo abandonado al lado de el del Rosal, y luego he tratado de llegar a la alcubilla de Santa Clara, desde el Orquín, por la ruta que me dijiste, pero me he quedado un poco antes, estaba muy pendiente y escurridizo, y me he mosqueado.
Yo tenía los del ejército en cd, cuando estaba trabajando, lo que parece es que no los copie.

Muchas gracias un abrazo
PD: Ya he estado en el pozo del Lagar, hablé con el tabernero el otro día y lo he fotografiado esta mañana.

Canario dijo...

Hace tiempo, en una charla con uno de los de la familia que explota y es propietaria del Bar de Los Arenales, nos contó que su padre se acuerda de ver ese puente de los soportes funcionando. Al parecer se construyó a la carrera cuando en avatares de la guerra incivil, algún bando demolió o dinamitó el puente principal (donde está el actual), dejando incomunicada la zona al otro lado del Rio. Parece que cuando se reconstruyó el actual, se dejó de usar el otro que acabó arruinándose, así que no es demasiado antiguo.

Si quieres fotos del Monasterio de la Aguardentera te puedo enviar a tu correo las del pasado sábado.

Un saludo!

Paco Muñoz dijo...

Muchas gracias Paco

Luego el actual ha sido siempre el titular. Interesante yo pensaba al revés. El monasterio de la Aguardentera tengo lo de arriba de la ermita, pero nunca he entrado. Pero se agradecen las fotografías, eso si citando la procedencia si se usan, es una norma mía.

Muchas gracias nuevamente y un abrazo.