jueves, 6 de junio de 2019

CIRCULAR TRAICIÓN, SAN CRISTÓBAL, MORALES, TRAICIÓN

Ruta de Wikiloc

Esta ruta de ayer día cinco de junio, es aparentemente apta para todas las edades, en función del ritmo que se desee llevar. La subida por la Cuesta de la Traición es algo molesta por lo escalonada en algunos tramos e inclinado piso en otros, por ello hay que cuidar los tobillos. Hoy hacía un aire que, comparado con días atrás era fresco, se agradece la bajada de la temperatura y la vuelta eventual a la primavera. La primera parte de la ruta desde el Depósito de Agua Potable de Emacsa, que es desde donde empiezo, es bastante pedregosa y en determinados lugares las zarzas están en galería, estrechando el paso y algunas queriéndose quedar contigo.

Comienzo de la Ruta y Sendero

La fuente de la Raja, continúa seca. Existe un pequeño contencioso de la Plataforma a Desalambrar, con la administración, a la que ha denunciado porque presuntamente están extrayendo el caudal algunos aprovechados, dando la imagen quienes se suponen son los responsables o sea los propietarios de una fuente pública, de desear que continúe seca para no mojarse. No es nada nuevo, es el pan nuestro de cada día en muchas facetas de la vida. Pagamos a un funcionariado para que gestione nuestra vida habitual y derechos, y en ocasiones parece que el administrado es el enemigo público número uno del administrador.

Zarzal Fuente de la Raja y la Hierba cabruna

 Explanada con la cantera

Pero esto daría para una tesis doctoral, presuntamente parece que las autoridades defienden a los que incumplen, a lo mejor sólo lo parece y es sólo fruto de la desidia. Continuamos la ruta, salimos de la fuente, habitada hoy por una hermosa rata, y se abre el Camino del Pretorio que es estrecho sendero y pedregoso, hasta ahí. La aparente cantera y un banco de los que pusieron cuando se habilitó el sendero con varios y sobre todo los puentes sobre el arroyo del Moro, aunque Google lo sitúe en otro lugar más al este, a pesar de habérselo comunicado más de una vez.

Ondulitas

Dos buenas rocas en mitad del camino

Son muchas las veces que he relatado la subida por la Cuesta de la Traición, y considero que no debo repetirlo. Lugares como las ondulitas o “ripple mark” fósiles; la colonia que aguanta, de zumaques; el serpenteante arroyo del Moro, y sus malecones de roca en casi todo su recorrido; los puentes de madera, cada vez que cambia el cauce de lugar en el camino; el cemento, Portland, no romano como leí en un blog, del vacie de un camión desde la carretera; etc. etc. 

Los acantos

Por aquí el camino es cómodo

Hoy he visto una planta corriente que me ha llamado la atención, hierba cabruna, o Bituminaria bituminosa. Leídas sus propiedades, en la sufrida Wikipedia, veo que contiene psoraleno y angelicina. Sirve para estabilizar suelos contaminados por metales pesados, y muchas opciones medicinales, pero lo normal es una planta forrajera. Las flores de los arquitectónicos acantos, buscan el cielo del lugar crecidas, en su particular primavera de lugares húmedos. Preciosas.

Un puente

Otro puente

Una vez arriba decidí llegar al llano del Lagar de la Cruz, al descansadero de ganado, para luego volver, en lugar de haber acortado por un sendero empinado casi borrado, que antaño era el Sendero de los Morales. La mayor parte de la Cuesta de la Traición, pertenece a la finca de la Aduana, casi al final pasamos un tramo por el feudo de Pino Gordo, y arriba del todo entramos en el descansadero que pertenece al Lagar de la Cruz. Los datos son del Catastro, puede que haya habido segregaciones parciales y aunque la finca se siga llamando así sea de otra propiedad.

Descansadero del Lagar de la Cruz

Camino de Los Morales

Como decía, llegué al Lagar de la Cruz y volví al sendero de los Morales que, por un trazado precioso, con senderos a la derecha conocidos, nos baja hasta el arroyo de San Cristóbal que luego es de Las Piedras aguas abajo, pero que en Google le llaman erróneamente del Moro. No es tan infalible San Google, lo mismo que no es verdad algo, porque lo ponga en un periódico o porque lo diga una televisión. Son muy imprecisos los medios porque muchos son tendenciosos.

Al fondo Córdoba único lugar desde el que se ve.

 Abrevadero de San Cristóbal

Un pequeño conejo saltó a la izquierda del camino. Éste, una mirla, y el cantar de algún cuco, nada más, ha sido el mundo animal, bueno y la rata de la Fuente de la Raja. De bípedos sapiens, afortunadamente ninguno, mejor, te evitas el cabreo habitual de que no contesten a los buenos días. Qué lástima que no haya leído mucha gente aquel Tratado de Urbanidad que tanto gustaba a mi madre, como libro de nostalgia personal de su infancia. Los dibujos -no era necesario saber leer- permitían saber lo que estaba bien y lo que no era correcto, pero por lo menos había una norma. Abajo no corté por el destrozado atajo por las motocicletas y bicicletas, y el remate del agua cuando llovía, está muy peligroso y no es plan de buscar una caída.

Llegando el collado de los Morales

Lamentable estado de camino

El abrevadero de San Cristóbal corre, con un escuálido hilillo, si sigue la cosa así dejará de correr seguramente, la sequía es considerable y preocupante. Subí el Sendero de los Morales. A la izquierda para el collado de San Pablo, Cañada de la Monja y la Conejera, a la derecha, no lo recomiendo un estrecho y peligroso sendero muy utilizado por algunos kamikazes de dos ruedas, por lo que no es apto para los bípedos jubilados. La bajada ahora Vereda del Villar, dirección a la finca matriz de Los Morales, una señora finca la Favorita, como la llamaban, frecuentada por Romero Barros y su familia. La del balcón de la Corredera probada su resistencia por los frailes jerónimos. 

Ya se ve la ciudad

Entronque con la trocha

Tampoco utilice, por el mismo criterio de precaución, quizá excesivo que sigo hoy, la trocha empinada que corta unas pocas de curvas del Sendero de los Morales. Ya vas viendo la ciudad abajo, y la inmensa mole del que será siempre el Sanatorio de Los Morales, que sustituyó al de Puerta Nueva. Solo hay un lugar más arriba en el que se ve la ciudad también, por el valle que modeló posiblemente, el arroyo de San Cristóbal. Este Sendero de los Morales está muy deteriorado y es complejo andar por él. Muchos acanalamientos del agua y usos no correctos acabarán por destrozarlo del todo. Ya estamos abajo, ahora o seguir o girar a la derecha.

Llegando al sanatorio

Camino de Antas

Giré a la derecha, siguiendo la frontera del Cinturón  Verde del norte, para encontrarme primero con la fuente, seca, Abrevadero de los Morales o Pilar de San Antón, y después con el arroyo de San Cristóbal y el venero de Antas (puede ser Santa, pero ya sabemos lo de los toponímicos). Cruce del puente, ligero sonido de agua, pero no el nivel habitual que vierte al arroyo y circulé por la galería que me lleva a la espalda de la urbanización del famoso en su día, casa del ministro Barroso, hoy reconstruida con notable gusto, pero que aún sigue el matorral amontonado, como linde, estimo idea de un servil servidor, ya denunciado en su momento.

Abrevadero y Fuente de los Morales o Pilar de San Antón

Arroyo de San Cristóbal y puente de Antas

Trozo del cinturón verde

Circulo por el Cinturón Verde, hasta llegar a la cerca metálica, lo abandono para bajar por la cerca citada de la parcela 115, hasta la calle de la Almunia. Allí tenía aparcado el coche, por eso empiezo siempre en la confluencia de la Almunia con la Cuesta de la Traición. En la esquina está el depósito de Emacsa, y en la acera sur unas hermosas parcelas en venta, de naranjales abancalados, u otros frutales. Fin del recorrido circular Traición, San Cristóbal, Morales, Traición.

Fotos del autor
Bibliografia del plano Raster del IGN y Catastro

2 comentarios :

Clipping dijo...

Nice article as well as whole site.Thanks.

Paco Muñoz dijo...

Muchas gracias, un saludo.